viernes, 12 de agosto de 2011

DÍA 1. ZARAGOZA - PERPIGNAN














Día 1 de agosto, comienza nuestro viaje, hacía mucho tiempo que no íbamos de vacaciones con el coche, así que esto ya era una novedad en la forma de organizarse, tanto es así que este año nos llevamos provisiones, que nos había preparado mi madre y me lleve hasta la nevera, ah, y también a fifi (*) que el pobre hacía un montón de años que no venía con nosotros.

(*) es el neceser grande, el de maletita, ese que no se puede subir a un avión.

Bueno pues a la las 6:00 am ya estábamos en marcha.

Primera etapa, Zaragoza-Perpignan, el viaje fue muy tranquilo pues a pesar de ser 1 de agosto no encontramos mucho tráfico, solo nos costó un poco pasar Barcelona, al fin y al cabo era día laborable...

Ya en Perpignan, es una ciudad (o pueblo, no lo sé), es muy parecido o por lo menos a mi me lo pareció, a Jaca, con su Ciudadela, su Castillo...

Lo primero a dejar las cosas en el hotel y a ver cosas...

No voy a poner esta es la iglesia de esto o de lo otro porque a pesar de que yo había preparado mis recorridos como tengo costumbre, no los tenía tan organizados como otras veces, así que esta vez ha sido un poco más de ver ambiente que de ver cosas




Esta es la primera iglesia que vimos y ya casi espanto a Adán y Miguel Ángel pues estaba en una zona cruce de la calle las Armas, con la Barceloneta y nuestro barrio Oliver.





El Castillo de los Reyes de Mallorca, está majo y además entre que entras y sales y subes y bajas matas un buen rato de sol.


Un poquito de turisteo por las calles, una tienda que se llama Matilde (como mi cuñada) y por favor, como no me iba a hacer una foto aquí, ya me han puesto una calle para celebrar la fiesta de mi cumple pues me la hice.



Y esto en si no tienen ningún misterio, solo que yo tenía curiosidad por ver algún cine de esos a los que iban lo españoles a ver El último tango en París (que dicho sea de paso, también hacía falta ganas para comerse tantas horas de coche, y que coches, y de carreteras, y que carreteras, me imagino) para ver una película. Ahora el cine está dentro de un centro comercial y ya no es lo que debía de ser.

Visto todo lo que había que ver, a cenar y pronto para el hotel, que al día siguiente hay que madrugar para ir hacia Marsella (nuestro segundo destino).

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