Ya sé que no os voy a descubrir nada nuevo pero os voy a contar las croquetas que hice.
Tenía unos filetes de pechuga, que como eran un poco gorditos, sabía que no se lo iba a comer nadie y un par de contramuslos con salsa que me habían sobrado de otro día, así que todo junto a la picdora.
A esto le añadí la salsa y todo junto a formar la pasta.
Esta parte la odio, me parece que tarda mucho en hacerse y nunca se si ya estará bien para poderla manejar cuando tenga que darles forma.
La deje enfriar y en el frigo toda la noche porque ya era tarde y no me apetecía ponerme hacer las croquetas.
Así que al día siguiente a darles forma y a la sartén.
Este fue el resultado, y les gustaron. A mi tal vez sean estas las croquetas que menos me gustan, y eso que en general me pierden, pero es que el pollo pasado por la picadora me queda demasiado pastoso, más como un paté que como una picada.
La mayor satisfacción que me produce es el haber podido reciclar algo de comida en vez de tirarla, que con los tiempos que corren...que os voy a decir.
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